No es la primera vez que se denuncia las malas condiciones de conservación de los pescados que comercializa la Municipalidad de San Luis a través del Programa Alimentos para Todos. Esta semana hubo puestos en la ciudad y nuevamente hubo quejas y denuncias. Hace dos meses un camión con pescado fue retenido por bromatología de Juana Koslay por el pésimo estado en que se encontraban los productos
“Un día van a matar a alguien”, fue el comentario lacónico de una lectora de Punto Aparte que entregó a esta redacción fotografías tomadas este viernes a cuatro ejemplares de pejerrey que le había comprado a la Municipalidad de San Luis en el marco de un programa de alimentos que comercializan a precios más baratos que en los comercios.
“Compré pescado el jueves en los camiones que pone la Municipalidad de San Luis, la bolsa ya perdía agua con lo cual supuse que se estaba descongelando, llegué a mi casa y los puse en la heladera para que se termine de deshielar y comerlos hoy, pero cuando los fui a cocinar detecté un olor nauseabundo y descubrí que estaban podridos, literalmente podridos”, dijo la señora que se vio obligada a cambiarle el menú a su familia.
La mujer describió una situación que se repite una y otra vez. Se puede comer barato, pero no por eso atentar contra la salud de las personas.
Punto Aparte consultó a empleados de Bromatología de la Municipalidad de San Luis y admitieron que ninguno de los camiones que vende estos productos pasa por la cabina de control.
