Fiscales, policías y funcionarios evaluaron la marcha de la investigación para encontrar a Guadalupe

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Anoche, al cierre de otra jornada con resultados negativos en la búsqueda de Guadalupe Lucero, la niña de 5 años desaparecida desde el lunes 14 de junio en la ciudad de San Luis, hubo una reunión donde se analizó la “marcha de la investigación” para saber “dónde están parados” según confió a Punto Aparte una fuente con acceso directo a la Plana Mayor de la Policía de San Luis.

Ese mismo alto funcionario graficó o sintetizó en palabras las conclusiones del escenario investigativo: “Podemos mostrar datos cuantitativos (por la enorme cantidad de operativos, rastrillajes y colecta de pruebas) pero lamentablemente muy pocos o casi nada cualitativo, es decir elementos de calidad probatoria que permitan establecer un móvil o una hipótesis sobre la desaparición de la menor”.

De ese cónclave participó el ministro de Seguridad, Luciano Anastasi, los fiscales Virginia Palacios y Esteban Roche; el secretario del Juzgado Penal 2, Gastón Pascuarelli Di Genaro; los integrantes de Gendarmería, que pertenecen a la división Delitos Complejos e Inteligencia Criminal, y personal de la Policía de San Luis que trabaja en la instrucción. Lógico estuvieron el jefe de Policía, Darío Neira; el subjefe, Claudio Latini, y el jefe de Operaciones, Dionisio Funes.

La Agencia de Noticias publicó que allí Anastasi repasó la marcha de las investigaciones y destacó el trabajo conjunto que están llevando adelante la Justicia junto a la Policía de San Luis, y la colaboración prestada por las fuerzas de seguridad federales y de otras siete provincias que han llegado a San Luis, para sumarse a la búsqueda de la pequeña de cinco años.

Ayer, los rastrillajes de la Policía se trasladaron a la localidad de Río Grande y sus alrededores. Personal de la Policía Ciudadana recorrió las calles del pueblo y las márgenes del río.  Otro grupo, encabezado por miembros del COAR, lo hizo en la zona del dique Antonio Esteban Agüero, detrás de los vertederos y en las paredes escarpadas de las sierras contiguas al camino que une Río Grande con Nogolí.

La denominada “zona cero” ubicada en las inmediaciones del barrio 544 viviendas, en el sur de la ciudad de San Luis, fue inspeccionada por los canes de rastreo de Bomberos de la Policía Federal de Buenos Aires y de San Juan, que desde este lunes se encuentran en la provincia.

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