Al menos tres personas murieron hoy como consecuencia de un sismo de 6,1 grados en la escala abierta de Richter registrado en la localidad iraní de Kaki, en la provincia sureña de Busher, según un cable de Efe.
La agencia estudiantil ISNA señaló que el sismo causó daños en las infraestructuras de la zona y en las casas del área afectada por el temblor, que ha sido muy amplia, aunque al haber tenido su hipocentro a 12 kilómetros de profundidad se espera que los daños sean limitados.
La central nuclear de Busher, situada a unos 100 kilómetros del epicentro del terremoto, localizado a 51,58 grados de longitud este y 28,48 grados de latitud norte, está en situación de normalidad, según la agencia local Fars.
La Media Luna Roja anunció que sus equipos de rescate ya se dirigen a la zona afectada y un centenar de ambulancias están preparadas para desplazarse al lugar, informó el director del Centro de Asistencia en Desastres y emergencias, Mohamad Tagui
Talebian, a la agencia oficial IRNA.
Varias ciudades han temblado con fuerza a consecuencia de este terremoto y algunas de ellas, como Shanbe, han sufrido fuertes daños, según autoridades locales.
En las laderas de algunas montañas cerca de Shambe se han producido deslizamientos de tierra, según las mismas fuentes locales.
Tras el sismo principal, que tuvo lugar a las 16.22 hora local (las 11.52 GMT), en la zona se han registrado varias réplicas, las dos más fuertes de 4,8 y 5,3 grados Richter.
Irán se encuentra en una zona de grandes fallas terrestres y los terremotos son comunes
en todo el país, algunos de ellos de magnitud devastadora, que han causado cientos de miles de muertos en las últimas décadas.
El último con graves efectos, muy similar en magnitud al de hoy, fue en agosto del año pasado, en la provincia de Azerbaiyán Oriental, donde murieron 306 personas y 4.500 resultaron heridas al registrarse dos movimientos consecutivos de 6,2 y 6 grados Richter.(Télam)