Dos hipoacúsicos vuelven a escuchar gracias a un novedoso implante aplicado en San Luis

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Dos personas volverán a escuchar con normalidad en San Luis, tras un nuevo modelo de implante coclear, realizado y financiado por la salud pública provincial esta semana, a pesar de las dificultades que impone la pandemia de coronavirus.

Se trata de un hombre de 29 años y un adolescente de 13, quienes fueron implantados «con éxito» el martes último, dijo a Télam el otorrinolaringólogo Sebastián Picciafuoco, encargado del área de implantes auditivos del Hospital San Luis .

Ambos pacientes son de la ciudad de Villa Mercedes, distante a 100 kilómetros de esta capital y comenzaron a tratarse en la ciudad de San Luis para recuperar su audición.

La práctica del implante es una intervención de alrededor de 3 horas de duración que «permite recuperar la audición normal, de acuerdo a las patologías que presentan», indicó el médico, que señaló que los pacientes pueden volver a escuchar 30 días después de la operación, cuando los dispositivos se activan.

En el caso del hombre de 29 años, la pérdida auditiva la provocó «un traumatismo de cráneo severo» y la respuesta al estímulo que se provoca, luego de la operación, «fue muy buena».

En el caso del paciente de 13 años, el implante tuvo otras características debido a que el joven presentaba «una falta de pabellón auditivo, por una mala formación genética que impedía que el sonido llegara al oído interno».

«En este caso, la operación se realizó sobre un hueso del cráneo y sus resultados también fueron muy buenos», describió el profesional, que agregó que a solo 24 horas de ser intervenidos «los pacientes pueden regresar a sus hogares».

Picciafuoco indicó que la intervención profesional de su área lleva alrededor de «70 implantes realizados en la provincia, que consisten en la ubicación de un dispositivo con un costo de más de 5 millones de pesos, de origen extranjero, que el Gobierno de provincia compra por lotes y administra a pacientes con distintas características de pérdida auditiva, de manera gratuita».

Aclaró que no todos las personas con pérdida auditiva son candidatos a un implante y por ello, el proceso de la cirugía llega luego de un trabajo «interdisciplinario que involucra a un equipo de profesionales que hacen la valoración de los casos».

Ese equipo está constituido por al menos 20 profesionales e involucra en una primera etapa a fonoaudiólogos, psicólogos y asistentes sociales.

Continúa luego con el personal médico en el quirófano, junto a anestesistas, enfermeros e instrumentistas y finalmente, antes del alta, los pacientes cuentan con una etapa de rehabilitación, donde intervienen otros profesionales, entre los que se encuentran quienes realizan la calibración de los dispositivos y las acciones de seguimiento.

Estas operaciones se realizan en San Luis desde diciembre de 2014 y entre los intervenidos se encuentra Joaquín, un bebé de 7 meses implantado en 2015, para resolver una sordera profunda, producto de una meningitis bacteriana y también Joudy, una niña siria de 11 años, integrante de una de las familias refugiadas en San Luis, a través del Corredor Humanitario, que fue operada en 2018.

El profesional destacó que desde que comenzó la pandemia, el equipo de trabajo del Hospital realizó cuatro intervenciones y que el próximo 10 de diciembre se realizará una más.

Aclaró que si bien la situación obligó a reprogramar el calendario, debido a que el personal de salud se vio obligado a «contener y tratar los contagios de la Covid-19», en la actualidad cuentan con solo «dos pacientes en espera».

«En todos los casos se respetaron los protocolos para garantizar la salud de los pacientes y del personal médico», aclaró y destacó que en la semana en la que se conmemora «el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, fue un gran estímulo para el equipo, poder devolver calidad de vida a nuestros pacientes».  (Télam)

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