Anoche el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, inauguró el “El Circuito de Esculturas” emplazado en distintos puntos de Terrazas del Portezuelo.
Se trata de ocho obras prestigiosas realizadas por artistas plásticos locales ubicadas estratégicamente en el parque nativo que cobija al edificio de descentralización administrativa.
“Gracias a todos los que hicieron posible esto que dejamos inaugurado hoy. Las obras son maravillosas. Lo creamos para que Terrazas del Portezuelo sea un parque recreativo y cultural a cielo abierto”, observó Rodríguez Saá este miércoles luego de recorrer las esculturas junto a sus autores.
El festejo por la iniciativa cultural comenzó este miércoles a las 20:30 cuando el primer mandatario provincial dialogó con cada artista premiado en los ochos puntos creativos del circuito de Terrazas del Portezuelo.
“Esto seguirá con más paseos y parquización porque el sueño final es que las Terrazas sean un parque recreativo y cultural de todos los puntanos y que el turista anhele venir. Son obras maravillosas que muestran esfuerzo, sacrificio y noté en todos los artistas una alegría que nos contagia a todos”, expresó el gobernador, una hora después durante la gala a la que asistieron el ministro de Obras Públicas e Infraestructura, Alberto Rodríguez Saá, el secretario General de la Gobernación, el diputado provincial Miguel Berardo, ministros, funcionarios, legisladores, familiares y amigos de los artistas en el Salón de la Puntanidad.
“Son nueve artistas que presentaron ocho esculturas para un concurso que comenzó en 2019, luego se suspendió por la pandemia y ahora pudimos concretarlo. Se habían presentado más de cuarenta proyectos en aquella instancia. La temática era la flora y la fauna puntana. Hay estilos para todos los gustos. La mayoría de las obras son en metal porque uno de los requisitos era que sean resistentes a la intemperie”, explicó la jefa del Programa, Pinta San Luis, Rocío Agüero.
Durante la bienvenida al emotivo acto, el trío Las Tres María interpretó “Libertango”, y el cierre concluyó con una cena para todos los invitados.
Obras, artistas premiados y ubicaciones
“Flor Onírica”, Andrés Lucero Corbetta, Paseo “La Gringa Poblet”
La escultura busca representar la simpleza de la floración de los arbustos puntanos, homenajeando la delicada tarea de estas flores en su armonía con la fauna y las estaciones.
“Zorro Gris”, Santiago Dondo, Paseo “La Gringa Poblet”
La obra hace referencia al animal autóctono de nuestra provincia. Sus dimensiones están pensadas para que se pueda apreciar a la distancia y la luminosidad de la imagen va mutando en torno a la luz natural.
“Lampalagua al acecho”, Marcelo Fredes, edificio Estrategia
Representa a este reptil autóctono de San Luis y en peligro de extinción. La obra la muestra al acecho, en un comportamiento solitario y nocturno en medio de un pastizal.
“QENTI, Guardián del tiempo”, Julián Picos, ingreso a Terrazas, por avenida Eva Perón
El QENTI, en voz quechua, significa colibrí, ave adorada por los pueblos originarios. La obra, con la estética del origami, la componen 3 elementos: la provincia de San Luis, la Rosa de los Vientos y el ave. En el centro, el calado de los puntos cardinales, representa todos los caminos que se pueden recorrer a lo largo de la vida.
“Hijas del Viento”, Agustina Bustos Vilela, acceso al Salón de la Puntanidad
Inspirada en la leyenda del clavel del aire, la artista encontró un hilo conductor entre la planta que nació mitológicamente de un femicidio y trazó un paralelismo con la contemporaneidad del empoderamiento de la mujer y su lucha contra las injusticias sociales. La figura de la mujer, representada en la flor, simboliza en su verticalidad la fuerza para resurgir.
“Aroma”, Mariela Fernanda Paniagua, edificio Estrategia
La escultura es una réplica a gran escala de la flor del Acacia Caven, de perfume y color únicos que son parte del escenario del monte cuyano. La ubicación de la obra y el material de construcción guardan una profunda conexión: el espejado del aluminio tomará, en primavera, un color amarillento, logrando así la mimetización con el monte y El Aromo.
“Guardianes de la matriz sutil”, Javi Ku, edificio Capital
Plantea el concepto de biodiversidad sustentable natural, como una estructura imperceptible que organiza el ecosistema. Compuesta por 3 módulos, la obra recrea una planta con una simetría radial. Un cuarto elemento, en el centro, aparece como “Guardianes de la Matriz sutil” de la serranía: las lechuzas simbolizando los sueños, y sobre ellas, floreciendo hojas y capullos.
“El Centinela”, Bettina Tarquini, edificio Conservador
La creación escultórica fue inspirada en el caburé grande, logrando una pieza de grandes ojos realistas que miran y vigilan, y un cuerpo con aspecto oxidado que comulga con el entorno paisajístico. Aprovechando el viento, su cabeza genera movimiento y además su plumaje, compuesto por elementos colgantes en acero inoxidable, crean sonoridad.
Fuente Agencia de Noticias